Antiaging o antienvejecimiento

El antiaging o antienvejecimiento es una ciencia que estudia la forma de retrasar el deterioro físico y envejecimiento de las personas, con el propósito de tener una vida más plena y de más calidad a medida que cumplimos años. El envejecimiento es un proceso inherente a todos los seres vivos, y por lo tanto no podemos escapar del mismo. En este proceso, intervienen factores internos, como las características genéticas y hereditarias del individuo, o también externos, como factores medioambientales y de estilo de vida.

Muchos de estos últimos factores causantes del envejecimiento son provocados por nosotros mismos, o por la falta de buenos hábitos. Por ejemplo, una buena forma de prevenir las molestias del envejecimiento es practicar deporte a diario. Con esto no nos referimos a ser ningún atleta, sino a acostumbrar al cuerpo al movimiento y la actividad. El ejercicio tiene beneficios a nivel físico, porque ayuda a que nuestra vida sea más larga y saludable, pero también a nivel psicológico, ya que, al sentirnos bien y vernos en buena forma frente al espejo, esto nos da una gran satisfacción y mejora nuestra autoestima. Además, se pueden establecer relaciones en torno al mismo y mejorar la vida social.

Para aquellas personas que tengan cierto hábito ya adquirido es muy bueno el ejercicio al aire libre, de tipo cardiovascular, como la bicicleta, el footing o incluso nadar. Pero también es muy aconsejable caminar a diario a paso ligero, pues quema calorías y fortalece el sistema circulatorio, y además, no provoca desgaste físico.

Por otro lado, otro principal componente para retrasar el envejecimiento es la alimentación. Entre las directrices a seguir está el hecho de no cometer excesos y realizar cinco comidas diarias. Entre los alimentos recomendados se encuentran principalmente las frutas y verduras, pues tienen sustancias naturales que contrarrestan los radicales libres (provocados por la destrucción de las células al envejecer) y multitud de vitaminas. Los cereales y el pescado también poseen características antioxidantes que los hacen buenos aliados en la lucha antienvejecimiento. Asimismo, deben evitarse sustancias tóxicas como el alcohol y el tabaco, que lo único que hacen es acelerar el proceso. Hay que disminuir en lo posible el consumo de azúcar, ya que se ha demostrado que el envejecimiento está muy ligado al metabolismo de la glucosa.

Es importante también tener buenos hábitos de descanso, procurando dormir al menos ocho horas diarias. Para ello, el ambiente debe ser relajado y se ha de evitar ir a dormir al poco de haber cenado, pues dificulta la digestión. Sumamente importante, es el hecho de evitar la exposición prolongada al sol, que es una de las principales causas del envejecimiento, sobre todo el cutáneo. Si se toma el sol, se debe hacer siempre en períodos muy cortos y con una alta protección, ya que los rayos uva inciden en la aceleración del envejecimiento porque dañan el ADN celular, además de causar muchos problemas cutáneos, como manchas y lesiones, que suelen salir a la luz una vez que se llega a la edad madura.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Time limit is exhausted. Please reload CAPTCHA.